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No es ningún secreto que las lesiones de hombro son frecuentes en los deportistas. El hombro es una articulación compleja y puede ser susceptible de sufrir lesiones debido a diversos factores, como una técnica inadecuada o un uso excesivo. Además, las lesiones de hombro pueden afectar al rendimiento de un deportista y dificultar su capacidad para entrenarse en la competición.
Por estas razones, es fundamental que los atletas hagan todo lo posible para prevenir las lesiones de hombro antes de que se produzcan.
Los deportistas que practican tenis, baloncesto, natación, golf, voleibol y béisbol son más vulnerables a las lesiones de hombro. Todos estos deportes implican movimientos por encima de la cabeza y suelen requerir que los jugadores utilicen los brazos por encima de la cabeza como parte de su rutina normal. Sin embargo, ésta no es la única forma de desarrollar lesiones de hombro. Los jugadores que son muy activos en otros aspectos también corren el riesgo de sufrir lesiones de hombro. Por ejemplo, los nadadores pueden sufrir lesiones de hombro si nadan con un patrón de brazada incorrecto o si realizan ejercicios intensos sin un acondicionamiento y entrenamiento adecuados. Aunque no existe una forma garantizada de prevenir las lesiones de hombro, hay medidas que los deportistas pueden tomar para reducir el riesgo.
Cómo prevenir lesiones.
Una de las formas más importantes de reducir el riesgo de lesiones de hombro es fortalecer y estirar los músculos de la parte superior del cuerpo. Mantener los músculos fuertes y flexibles puede ayudar a protegerlos del sobreesfuerzo y la tensión durante el ejercicio y otras actividades atléticas.
Pero, en caso de que se produzca una lesión, es importante buscar atención médica inmediatamente. Un médico podrá diagnosticar la lesión y tratarla adecuadamente. Así podrá evitar que empeore y que pueda volver a practicar deporte en el futuro.
El esfuerzo repetitivo durante los años de la práctica deportiva de este tipo de deportes, hace al deportista ser más propenso a tener lesiones de algo que se llama peel back, que produce una sensación de mordisco interno, eso ayuda a una torsión de la inserción del tendón del bisep y a producir lo que se llaman los desgarros parciales del manguito rotador.
